lunes, 31 de agosto de 2009

DECLARACIÓN DE JÓVENES CONTRA LA VIOLENCIA

Nosotros, jóvenes salvadoreños, en la ciudad de San Salvador el día 30 de agosto del presente año, en el monumento “El Salvador del Mundo”, nos pronunciamos en contra de la violencia que vivimos en el país.

Constatamos que:

El Salvador vive una dura situación de violencia, que se ha agudizado con el transcurrir del tiempo. El número de asesinatos ha incrementado, pasando de 33 homicidios en 2004 a 61 por cada 100.000 habitantes en mayo del año 2008, lo que convierte al país en el más violento de Latinoamérica.

De acuerdo a un estudio difundido por la Red de Información Tecnológica Latinoamericana (RITLA) en 2008, El Salvador posee una tasa de 92,3 homicidios por cada 100.000 habitantes, dentro del rango de 15 a 24 años de edad.

La situación del sistema de administración de justicia es alarmante, pues según datos que fueron publicados por un organismo internacional, el 84,71% de homicidios no llegan al conocimiento del sistema judicial, mientras que sólo son resueltos el 3,8% de los que llegan a los tribunales.

El temor de la población a perder la vida, como resultado de las consecuencias físicas y psicológicas que la violencia acarrea, están deteriorando la calidad de vida de las personas.

Considerando que:

La violencia es una problemática de la que nadie está exento, todos como sociedad civil debemos aportar ideas y apoyar esfuerzos que permitan buscar los medios para contrarrestar los comportamientos violentos, absolutamente nada justifica la violencia, queremos condenar cualquier manifestación de ella, ya sea física, psíquica o moral, la violencia es producto de múltiples factores: sociales, culturales, económicos, institucionales, situacionales, familiares, personales, etc.;

todos debemos tener una participación activa en la solución sin esperar a que sea sólo el gobierno el responsable de actuar, existe una notable falta de articulación entre las propuestas de las diferentes instancias encargadas de contrarrestar y prevenir la violencia, haciendo que estos esfuerzos se vean atenuados y dispersos;

la violencia debilita las bases de sustentación del sistema democrático y, sobre todo, las garantías de protección de los derechos fundamentales;

la participación activa de los jóvenes y de la población en general es urgente y necesaria para que las autoridades pertinentes tomen decisiones de manera firme y contundente.

Por consiguiente, Exigimos que:

Se divulguen y respeten los derechos fundamentales del pueblo salvadoreño;

se ratifique la Convención Iberoamericana de Derechos de los Jóvenes;

el gobierno se comprometa a trabajar en la formulación de políticas públicas de seguridad ciudadana, integrales y duraderas; encaminadas a combatir el problema de la violencia, que ayuden no sólo a controlarla sino también a prevenirla;

las instituciones encargadas de la administración de justicia se comprometan con el pueblo salvadoreño a mejorar su accionar, para evitar que los actos violentos queden en la impunidad;

la Asamblea Legislativa nombre al Fiscal General de la República, con base en los requisitos de moralidad y competencia notorias que exige nuestra Constitución; además, exigimos al funcionario que resulte electo, que defienda verdaderamente los intereses de la sociedad y sea capaz de promover de manera transparente la investigación de los hechos delictivos;

el Estado salvadoreño se someta a la competencia de la Corte Penal Internacional,

se prohíba a la población civil la tenencia, porte y uso de armas, pues estas tienen un único fin, matar;

la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos se mantenga siempre fiel al mandato que emanó de los Acuerdos de Paz y vele celosamente por el respeto y la garantía de los Derechos fundamentales; así también, que investigue rigurosamente todos los casos de violaciones a los mismos;

se mejore el sistema de protección a víctimas y testigos para que se genere confianza y, en consecuencia, una cultura de denuncia ante los hechos violentos;

las municipalidades participen activa y coordinadamente en la prevención de la violencia;
Exhortamos a:

Que el gobierno central, implemente políticas públicas de seguridad ciudadana que sean coherentes, transparentes y sostenibles;

las instituciones de seguridad pública para que se comprometan con la depuración de su personal y hagan mayores esfuerzos por incrementar su credibilidad y confianza ante las y los salvadoreños;

que los partidos políticos antepongan los intereses del pueblo salvadoreño frente a sus intereses personales o partidistas;


el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, en conjunto con el Consejo Nacional de Seguridad Pública se encarguen de articular las propuestas concretas de diversas instancias encaminadas a hacerle frente a la violencia;

las Alcaldías, para que establezcan Concejos Municipales de Juventud que consoliden iniciativas provenientes de la población juvenil y se conviertan en intermediarios entre la ciudadanía y el gobierno local para promover la participación de las salvadoreñas y los salvadoreños;

las y los jóvenes, para que asumamos un papel protagónico en la sociedad y le demos vida al Movimiento de Jóvenes por la Paz, integrado por jóvenes pertenecientes a comunidades de base, estudiantes de universidades y centros escolares, grupos juveniles, niñas, niños y jóvenes en general que deseen comprometerse con la defensa de sus derechos y con el ejercicio de sus deberes, con capacidad de interpelar a los diversos actores sociales, con disposición para actuar en las soluciones que el país necesita y con la plena convicción de que las cifras sobre violencia no son sólo estadísticas, números o gráficas, sino que son, ante todo, personas.

Nos comprometemos (como jóvenes) a:

desenvolvernos de manera no violenta, fomentando una cultura de paz y el cumplimiento voluntario de las normas de conducta en todos los ámbitos de los que formamos parte, con el fin de lograr que la resolución pacífica de los conflictos sea una práctica común entre todas y todos;

cumplir nuestro deber ciudadano de denunciar los actos de violencia ante las autoridades pertinentes;

darle seguimiento a las políticas públicas enfocadas a prevenir y contrarrestar la violencia, ocupando cada vez más espacios de participación ciudadana;

crear más espacios de interlocución entre los actores sociales y los jóvenes, en coordinación con instituciones de gobierno, iglesias, empresa privada y demás organizaciones para unir esfuerzos en la creación de una cultura de paz y la no violencia;

proponer la creación de un foro permanente de concertación nacional a través de los Concejos Municipales de Juventud o mediante otras instancias, que integre las fuerzas vivas de la sociedad en especial a los jóvenes organizados y a aquellos que deseen organizarse;

promover la creación del Movimiento de Jóvenes por la paz en el país, para que la juventud actúe de manera activa en prevenir y hacerle frente a la violencia, promoviendo la formación de niños, niñas y jóvenes, brindándoles herramientas que les permitan desempeñar un papel activo para transformar su realidad;

brindar un informe anual a la sociedad salvadoreña sobre el seguimiento realizado a nuestras exigencias y a nuestros compromisos planteados en esta declaración.

domingo, 26 de julio de 2009

Elección del Fiscal General de la República: prueba de fuego en la palestra política


Por Lucía Sánchez
Estudiante de Derecho-UES


La elección del Fiscal es de suma importancia, ya que es una de las tres instituciones que conforman el Ministerio Público, teniendo dentro de sus funciones la defensa de los intereses del Estado y la sociedad, así como el monopolio en la persecución del delito. Conforme a la Constitución de la República, tanto la elección de los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia como la del Fiscal General de la República, es potestad exclusiva de la Asamblea Legislativa, que debe elegirlos con mayoría calificada, es decir, dos tercios de los Diputados electos.

Habría que analizar el actuar del Presidente de la República, que está fungiendo como mediador en la negociación de los Diputados; ya que si nos ponemos constitucionalistas, la Carta Magna señala que las funciones de los Órganos fundamentales del Estado son indelegables, por lo que el Presidente no debería tener ninguna intervención en los asuntos del Órgano Legislativo; dicho en lenguaje salvadoreño: el Presidente no tiene vela en ese entierro. Sin embargo, de su intervención han surtido algunos efectos positivos, por lo menos es lo que se puede notar en la pasada elección de los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia.

En ese sentido se exige que la Asamblea Legislativa elija con seriedad y rigurosidad a funcionarios idóneos, profesionales capaces, éticos y de moralidad notoria, además de los requisitos que la Ley exige para optar a estos cargos públicos; todo esto se debiendo realizarlo mediante proceso de negociación transparentes, adecuados y sin ataduras partidistas.

Entrando un poco al tema de intereses partidarios y de los procesos engorrosos que implica una elección de esta naturaleza, se puede ver que siempre estos procesos tardan bastante en resolverse, rebasando incluso los términos establecidos en la Constitución. Por ejemplo, la no elección del Fiscal General de la República obedece por un lado a los intereses de aquellos que pretenden elegirlo siguiendo como principal criterio la lealtad o conveniencia partidaria, y por otro están los que buscan que la persona que esté a cargo de esta institución sea la más adecuada, que actué con la transparencia e independencia que requiere dicho cargo. En pocas palabras: que no sea corrupto.

La actuación del actual Fiscal adjunto como Fiscal General de la República no está contemplada en la Constitución, ya que la figura del adjunto nada más es creada como algo accesorio, para lo cual debe tenerse en cuenta el principio que en derecho “lo accesorio siempre sigue a lo principal”, entonces, si no existe lo principal, que es la elección del Fiscal General por la Asamblea Legislativa, no tiene razón de existencia lo accesorio.

Funcionarios como Astor Escalante, Félix Garried Safie y Belisario Artiga están ligadas claramente al partido ARENA, explicando en buena manera el encubrimiento por muchos años de tanta corrupción en el Ejecutivo y la no investigación de tantos crímenes. Como sociedad salvadoreña ya no podemos continuar apoyando a políticos que siempre que se da una elección de esta naturaleza, ponen en peligro la institucionalidad democrática del país, ya que a la larga es la población quien saca la peor parte de todo esto.

Es hora señores diputados que terminen con ese circo político, el pueblo necesita que ustedes demuestren el porqué están en esos puestos, necesitamos una verdadera y legítima representación dentro de la Asamblea Legislativa; demuestren que no sólo sirven para cobrar el cheque el fin de mes; ya no deben seguir dándole refugio a sus conveniencias personales o partidarias, porque de esa forma estarán creando, educando y desarrollando una sociedad sin valores, insensible.

Es hora de reconciliar el país, quitando intereses mezquinos y sobresaliendo en bienestar de las grandes mayorías.

miércoles, 1 de julio de 2009

ANTE EL GOLPE DE ESTADO PERPETRADO EN HONDURAS



Las Juventudes Socialdemócratas de El Salvador (JSD), exponemos a la nación y la comunidad internacional:

Que condenamos categóricamente el golpe de Estado realizado en Honduras el pasado domingo.

Que nos unimos a la voz de la comunidad internacional para exigir la inmediata restitución del Presidente Manuel Zelaya en su cargo.

Que rechazamos las vergonzosas declaraciones de miembros del partido ARENA, como Donato Vaquerano (Jefe del Grupo Parlamentario), Gloria Salguero Gross (fundadora y ex dirigente de dicho partido), entre otros, que insisten en justificar la realización de dicho golpe de Estado y que insisten en no llamarlo como tal.

Que el nombramiento del presidente del congreso de Honduras como presidente de la república, es ilegítimo y sólo busca revestir de una falsa legalidad democrática un genuino golpe de Estado.

Que debido a la historia de militarismo en América Latina no debemos dudar en condenar cualquier uso de dicha institución para lograr prevalencia política.

Por tanto:

Solicitamos al gobierno del Presidente Mauricio Funes que realice una contundente gestión diplomática para restablecer al Presidente Manuel Zelaya.

Nos unimos a las declaraciones y acciones tomadas el domingo pasado por nuestro Presidente Constitucional de la República, con respecto a la situación hondureña.

Exhortamos a la ciudadanía para que no se deje engañar por las interpretaciones falaces de personeros de ARENA, que intentan tapar el sol con un dedo al no querer denominar como golpe de Estado lo sucedido en Honduras.

Pedimos a la población que rechace totalmente a aquellos políticos y partidos salvadoreños que no rechacen contundentemente el Golpe de Estado en Honduras, pues eso significa que en sus mentes y corazones aún existen fuertes resabios de autoritarismo que los pueden llevar a cometer atentados contra nuestra democracia.

viernes, 29 de mayo de 2009

IDONEIDAD, INSTITUCIONALIDAD Y ARITMETICA

Por Raúl Vásquez
Las tres expresiones que aparecen en este encabezado parecieran no guardar relación alguna, pero para opinar sobre la elecciones del primer órgano del Estado, cada cierto tiempo, en cuanto a Funcionarios de Segundo nivel (1), si, estos vocablos se tienen que relacionar, de alguna manera (2).
IDONEIDAD. Según una de las acepciones de diccionario, Idoneidad significa, “capacidad o capacitación para el desempeño de una función o cargo”. Cuando se cursa, en el último año, la carrera de Ciencias Jurídicas, la Asignatura “Filosofía del Derecho”, la Idoneidad es vista como un Valor o Principio (de los fundamentales), en cuanto a cualidad o característica que debe de tener un profesional del Derecho, para que se le pueda confiar y asignar un empleo o cargo cualquiera.
Entonces, Idoneidad implica no solo capacidad y experiencia en la materia, sino además, honradez, independencia de criterio, y una trayectoria y vocación demostradas para el servicio público (requisitos que están más que claros – en cuanto al tema que aquí se trata -, en la Constitución y leyes respectivas).
De las ternas que existen para la próxima elección del nuevo Fiscal, por decir algo, los diputados de la Asamblea Legislativa (de la actual Legislatura), deberían elegir al profesional más capaz, al más experimentado, al más honesto, al que se considere que pondría por encima, los intereses nacionales (en vez de los de su partido, sus sectores o su “cherada”, para poder investigar y combatir el delito - que tanto abunda en nuestro país -). La Asamblea Legislativa debería de proporcionarle a la sociedad, un Fiscal General, verdaderamente, “de la República”, un profesional del Derecho, a todas luces, Idóneo para el cargo.
INSTITUCIONALIDAD. Cuando se firmaron en enero de 1992, los Acuerdos de Paz que pusieron fin al Conflicto Armado, se desarrolló en nuestro país una especie de Refundación del Estado, disolviéndose una serie de instituciones (Cuerpos de Represión política, batallones élites, por ejemplo) y se crearon nuevas (instituciones), fortaleciendo ó modificando otras (como el nuevo Cuerpo de Seguridad, PNC, la PDDH, el TSE, el CNJ, etc).
Tanto las que se disolvieron, como las que se crearon o modificaron tenían como gran propósito (nacional), conducir al país hacia la plena vigencia de los derechos humanos, reconciliar la sociedad y, consolidar la democracia.
Aunque se avanzó (innegablemente) en la primera fase, con leyes modernas (en materia penal, de familia, normativa moderna para el nuevo cuerpo de seguridad, etc), se puede afirmar que a partir del tercer gobierno de Arena, se comenzó un proceso de claro deterioro en el funcionamiento de las instituciones del Estado. Algunas cuestiones, dignas de mencionarse, para ilustrar:
PNC. Se introdujo una reforma que permite que un elemento proveniente de las entrañas del propio Cuerpo de la Policía pueda ser el Director del mismo. En la normativa original, el Director General debía ser un elemento ajeno a la estructura del Cuerpo en mención. Otras reformas a la misma ley (de policía), plantean notorios retrocesos en materia institucional.
Independencia Judicial? En una especie de “estrecha colaboración”, el TSE y la CSJ, a iniciativa de dos partidos políticos que debían ser clausurados por no haber obtenido el porcentaje necesario para sobrevivir, fueron prácticamente EXHUMADOS y vueltos a la vida jurídica y política (con los mismos nombres y símbolos), muy a pesar de que con esto se violó de manera flagrante la constitución.
CSJ. Con un procedimiento similar, en el año 2004, se nombra por parte de la Asamblea Legislativa, el tercer magistrado del TSE (miembro dirigente de un partido político – el PCN -), cuando ese cargo le correspondía ocuparlo a un profesional propuesto por otro partido – CDU - (partiendo del resultado electoral – como la Constitución y el Código Electoral lo establecen).
ÓRGANO LEGISLATIVO. Leyes que ameritaban de una mayoría calificada han sido aprobadas en la Asamblea Legislativa por mayoría simple, acudiendo a artificios jurídicos Y políticos, cada vez que el Ejecutivo lo ha deseado (para esto se ha recurrido a la “obtención” de los votos de los restantes partidos de derecha: PDC Y PCN).
Papel de la Corte (donde esta la Independencia ?). En ningún caso la “colaboradora” Corte Suprema de Justicia ha tenido voz propia para pronunciarse sobre las Inconstitucionalidades o ilegalidades cometidas, por o a iniciativa del Órgano Legislativo, el TSE o cualquier otro Órgano o instancia estatal.
Este es el actual estado de cosas en materia de Institucionalidad (¿Democrática ?).

ARITMÉTICA. Como el tema específico tiene que ver con las elecciones de funcionarios de segundo nivel, ó SEGUNDO GRADO (que son los que elige la A.L.), el término, con nombre y apellido, sería, Aritmética Legislativa.
Sin pretender ser escolásticos ó historicistas, hay que mencionar, que desde hace más de 10 años, el partido oficial – ARENA – sin ser el único responsable -, dio inicio a un franco retroceso en materia de Institucionalidad Democrática, pervirtiendo principios y valores fundamentales, como la División e Independencia de los Órganos del Estado.
Paralelamente, ha venido contaminando la naturaleza del resto de instancias estatales (como las del Ministerio Público, Concejo Nacional de la Judicatura, la PNC, etc); y para lograrlo, prostituyó sistemáticamente a los partidos políticos de su mismo signo ideológico (y los mismos, que no opusieron mayor resistencia – por cierto -).
De esta manera se llegó – con el auge, que el fenómeno de la polarización ha experimentado -, al punto en que cada titular, de cualquier institución – para ser electo – debe ser o estar considerado como propuesta y CUOTA de cualquiera de los partidos que están presentes en la Asamblea (especialmente de los que son Mayoritarios o bien, socios del partido oficial). Así la Corte de Cuentas de la República, le pertenece mayoritariamente al PCN.
Así las cosas, sin que estemos ante un Clásico Régimen de partido Único (tipo Dictaduras militares como las del siglo pasado) con un solo partido en todos los órganos e Instituciones, si estamos avanzando hacia un régimen autoritario – que ya no cuenta con Guardia Nacional – pero puede aprovechar las “reformas” que en cada materia o rubro SE han venido “diseñando y aprobando” para sostener el sistema de CUOTAS PARTIDARIAS – en contra de los Principios y valores, de la IDONEIDAD PARA EL CARGO Y LA INSTITUCIONALIDAD DEMOCRÁTICA, que deberíamos recuperar.
Para los próximos días, es responsabilidad de los partidos grandes, más que para los CORRUPTIBLES, RETOMAR EL SENDERO DE LA INSTITUCIONALIDAD DEMOCRÁTICA Y REINVENTAR LA MANERA EN QUE SE HA VENIDO HACIENDO POLITICA, A BASE DE CORRELACIONES MATEMATICAS.
HOY POR HOY Y en su orden, lo que viene es la elección del nuevo Fiscal, luego los cinco Magistrados de la CSJ; se rumora sobre un COMBO, es decir, en lenguaje “aritmético”: “te doy por aquí… me das por allá … y quedamos pendientes para lo que hace falta” .
Esperemos y tratemos que los Principios de IDONEIDAD PARA EL CARGO y la recuperación de la INSTITUCIONALIDAD DEMOCRATICA prevalezcan.
Ampliaciones:
1 - Titulares del Ministerio Público (los dos Procuradores y el Fiscal), Magistrados (é incluido el Presidente de la Corte Suprema de Justicia), Concejales del Concejo Nacional de la Judicatura; Presidente de la Corte de Cuentas de la República – que ni siquiera necesita mayoría calificada - . Al Presidente de la Corte de Cuentas se le elige por MAYORIA SIMPLE.
2 - Para no caer en el idealismo puro, ni en la decepción total por los resultados que hoy por hoy están pendientes (ya que hay “elecciones”, en los días venideros, en el Primer Órgano o “poder” del Estado). El partido oficial tiene preparado un plan para seguir funcionando con su Fiscal (a partir de una reforma que hoy por hoy es LEY de la República).

viernes, 24 de abril de 2009

MOVIMIENTOS DE JÓVENES PARA FORTALECER LA DEMOCRACIA Y LA NUEVA POLÍTICA


Por Lya Ayala Vallejo

Las Juventudes Socialdemócratas (JSD) realizaron recientemente en las instalaciones del IEJES un coloquio con Francisco Jovel, en un esfuerzo semanal que convoca a una personalidad del ambiente político nacional para desarrollar intercambio de ideas con los más jóvenes y realizar un diagnóstico de la situación actual de su participación en el proceso democrático del país.

Una idea que Jovel mencionó durante su interesante intervención me provocó escribir este artículo: cuáles serían las condiciones que deberían considerarse para formar movimientos de jóvenes que no sean absorbido por intereses de grupos políticos.

El asesor legislativo y firmante de los Acuerdos de Paz consideró que los movimientos de jóvenes deben reinventarse y deben tener cuidado de calcar la estructura partidarias actuales, al respecto dijo: “la organización debe ser lo más plana, lo menos jerarquizada posible, donde la capacidad de los jóvenes no sea disminuida (…) donde prime la tolerancia sobre cualquier cosa”.

Este planteamiento encierra una propuesta sumamente provocadora e invita a considerar que las incipientes demostraciones de opinión colectiva de la población, debe pasar por una reestructuración absoluta o, para el caso de los jóvenes, crear una estructura que les permita a estos elaborar no solo nuevas maneras de entender y hacer política, sino crear una nueva sociedad basada en la concertación, comprensión y tolerancia.

Y dónde radica buena parte de este proceso de modificación sino en la potenciación y readecuación de las políticas educativas y la estimulación de la cultura; pero más allá de esto, en la formación de un sólido cimiento de pensamiento creativo y solidario, que permita arrancar de raíz la corrupción e injusticia que se ha instalado en la coexistencia y relaciones de los salvadoreños.

A pesar de la esperanzadora idea de Jovel, la realidad inmediata impone otra pregunta, si los jóvenes representan el 33% de electores y, según reciente estudio de Iniciativa Social para la Democracia (ISD), apenas alcanzó un 3% en participación directa e indirecta en el proceso eleccionario del país, cómo abrir el espacio y las oportunidades a los que podrían ser los generadores de una reforma urgente de los cimientos políticos, sociales y culturales de este país.

La respuesta tiene implicación directa con la cultura del autoritarismo, como señaló el mismo Jovel, que a pesar de las condiciones de ley no existe democracia y se impone el autoritarismo. Donde los que ostentan el poder y la toma de decisiones se aferran a una postura o a un puesto con el fin de establecer condiciones que impidan realizar transformaciones.

Es en este punto que la capacidad de los jóvenes no sólo radica en su asombro frente a lo novedoso y a su necesidad de cambio, la potencia inherente a los jóvenes viene dada por la capacidad de renovar lo obsoleto. De ahí que la cultura del autoritarismo puede ser absorbida, poco a poco, por la necesidad de una cultura de tolerancia y respeto, acuñada por la producción de lo intelectual y espiritual a través de la educación y el conocimiento.

La tarea es de largo plazo, es verdad, pero dadas las circunstancias actuales y la demanda de una visión más profunda de la realidad nacional por las posturas extremas de los partidos políticos y la misma sociedad; los jóvenes deben tomar la iniciativa pronto e iniciar el recorrido sobre la marcha, sobre lo que existe y eso sí demanda coherencia y compromiso con una realidad compleja en la que habrá que poner mucho esfuerzo.

jueves, 16 de abril de 2009

¿Y DESPUÉS DEL NEOLIBERALISMO QUÉ?



Editorial de la Revista Ciencia Política


En los anteriores editoriales de esta revista hemos analizado el deterioro y derrumbe del neoliberalismo a nivel mundial, expresado primero en la crisis financiera global y posteriormente en el debilitamiento de los principales rubros de la economía mundial. La pregunta pertinente y necesaria que cabe hacerse en este momento es qué vendrá después del neoliberalismo.

Responder a esa interrogante es importante porque de ello dependerá la eficiencia con la que será superada las crisis económica. En tanto respuesta a la realidad, ésta vendrá dada por decisiones y acciones de los líderes políticos y económicos, pero debiendo tener como sustento un análisis que les permita considerar viables sus decisiones.

Desde la academia corresponde brindar análisis más apegados a la realidad, sobre los cuales podrían apoyarse las posibles decisiones que superarían la crisis. Dichas respuestas deberían intentar remodelar la economía, superando los postulados neoliberales, los cuales en la práctica ya están siendo trastocados por las acciones inmediatas tomadas por la mayoría de mandatarios de las grandes potencias mundiales, pero aún sin definir claramente la ruta, el modelo a seguir.

Es cierto que se están tomando acciones inmediatas y necesarias para disminuir los efectos de la crisis por parte de los principales líderes mundiales, pero aún no sabemos hacia donde deben dirigirse los nuevos modelos político-económicos con los que el mundo podrá gestionar a partir de la vigésima década del siglo XX, esperando que dicho modelo no se agoté ni tan rápido ni con efectos tan nocivos para las próximas generaciones.

Proponen algunos filósofos que cuando no se puede definir con precisión alguna situación, objetivo o concepto, es inteligente empezar por definir lo que no es. Es decir, iniciar por su negación, por lo que no es o no debe de ser, para poder irnos acercando a lo que es o cómo queremos que sea.

Intentaremos hacer un análisis para vislumbrar posibles respuestas modélicas, partiendo de su negación, es decir de lo que ya no debe ser. Partiremos para ello de los últimos veinte años de aplicación de modelo neoliberal en El Salvador, que nos dejan como lección que un nuevo modelo político-económico no debe:

1) Continuar con esquemas fiscales regresivos, pues no han generado una tributación más equitativa de los ingresos, por el contrario la tendencia a la disparidad en los ingresos entre las capas sociales más altas y las más bajas, se ha ido acrecentando.

2) Continuar con esquemas tributarios de baja recaudación, sobre todo en los sectores sociales de mayor ingreso, pues esto debilita al Estado en su rol de redistribuidor y propiciador de condiciones para la generación de riqueza.

3) Continuar basando la actividad productiva del ser humano en energías fósiles y limitadas, por lo que es necesario hacer un rápido y profundo giro hacia la investigación para el uso y producción de energías renovables y alternativas.

4) Seguir manteniendo brechas tan desiguales de educación entre la población, pues la educación es un elemento clave para la generación de equidad.

5) Seguir bajo la lógica de control mínimo del sistema financiero, ya que dicha lógica ha dado espacio a la corrupción, la alta concentración de riqueza y el consumo desmedido por parte de minorías cada vez más reducidas.

6) Seguir procurando el libre comercio en condiciones tan desfavorables para algunos países. Es importante que comience a darse énfasis al comercio como un elemento de integración de las naciones que tienen intereses, necesidades e identidades similares o complementarias. No se trata de oponerse al libre comercio, sino de generarlo dentro de marcos estratégicos de desarrollo para las naciones.

7) Continuar utilizando la actual concepción del término o condición de “Crisis”, pues dicha condición ya era vivida por grandes proporciones de población en el planeta, y muchos fueron los organismos encargados de vislumbrarlo. Esto quiere decir que debemos de redefinir cuándo existirá crisis y para quiénes hay crisis, porque millares de seres humanos en el mundo han estado viviendo en situación crítica desde hace mucho tiempo, incluso desde que el modelo neoliberal era considerado relativamente estable y eficaz por algunos.

8) Continuar basando la gestión económica en “credos ideológicos”, lo cual no significa un abandono o ninguneo de la ideología, por el contrario, lo importante es que las respuestas políticas estén basadas en ideas contrastadas con la realidad, en un ejercicio constante de remojo y debate, para no atrofiar la dinámica social ni económica con medidas que no van de acuerdo a las nuevas realidades.

Esas al menos serían ocho condiciones o premisas sobre las que un nuevo modelo político-económico, alternativo al neoliberalismo no debería sustentarse, pues han significado en buena medida sus principales defectos y generadores de contradicciones. Más que dar repuestas fáciles se trata de ir buscándolas a través del franco debate de ideas, en el que participen la mayor cantidad de actores posibles de las sociedades.

Nuevamente, uno de los grandes errores cometidos por el neoliberalismo, puede ser similar al de los países que vivieron el socialismo real, que anularon el debate de ideas alrededor de su modelo, llevándolo a la esclerosis y finalmente a la parálisis. Quizá la respuesta a la crisis económica, antes que de respuestas eminentemente económicas, requiera de medidas políticas orientadas a la discusión de modelo, tanto al interior de los Estados como en la sociedad mundial de Estados.

Los recursos previstos por las democracias representativas deben ser profundizados y renovados para hacer un mejor diálogo al interior de los Estados democráticos, mientras que el fortalecimiento del multilateralismo quizá sea la herramienta más idónea para la discusión en la sociedad global sobre los nuevos modelos de gestión política en la economía.

Es hora de hacer un replanteamiento serio y rápido, pero esa premura tampoco debe hacernos caer en el error de creer que las respuestas a esta crisis económica vendrán dadas en “encerronas” de técnicos y/o políticos iluminados. Ese fue uno de los grandes errores del neoliberalismo, que al menos para América Latina se convirtió por bastante tiempo en un rosario incuestionable, con medidas-receta elaboradas desde reducidos espacios técnico-políticos (cuya expresión máxima fue el Consenso de Washington), e impuestas con la más obtusa y vertical concepción de las democracias representativas, llegando a abusar incluso de dichos mecanismos.

Hay que insistir que si esta crisis es mundial, su respuesta debe ser buscada de igual manera. Las respuestas ágiles de los principales mandatarios del mundo son necesarias, pero no precisamente acertadas para la superación a mediano plazo de esta crisis. Es hora de abrir el debate, un gran debate mundial sobre los modelo de gestión político-económica, sin que dicha discusión se vuelva en una maraña ideológica que nos enrede más, pero tampoco en una discusión carente de ideas.

En un período de crisis debe acentuarse todavía más que las ideas sólo son buenas en la medida que son útiles. Cuando uno está atrapado en un situación difícil, la mejor respuesta es la que tenga menos costos, sea más ágil y finalmente nos saque totalmente de la situación crítica. Por el momento nos encontramos en un momento crítico, intentando salir, pero sin rumbo. Lo importante quizá sea definir rumbos tentativos ágilmente, pero generando espacios para discutirlos mientras encontramos respuestas más estables, es decir, más sostenibles.

Y cuando se encuentre ese modelo más estable es importante recordar no hacerlo incuestionable, no sacralizarlo ni tampoco satanizarlo.

miércoles, 25 de marzo de 2009

Análisis del resultado de la elección presidencial

Te invitamos a escuchar el programa de YSUCA: Quién tiene la palabra, realizado la semana luego del 15 de marzo, que tuvo como invitados a Marlon Anzora y Luis Armando González, quienes analizaron el resultado de la elección presidencial.
Para escuchar el audio, dé click en cualquiera de los vínculos siguientes: http://www.uca.edu.sv/noticias/ Búsquelo en la esquina inferior derecha, sección Entrevista. O directamente en el link:
http://www.uca.edu.sv/showentrevista.php?id=90137&titulo=%3Cem%3EQuién


viernes, 20 de marzo de 2009

EL DÍA DESPUÉS DE LA ELECCIÓN

El día después de la elección
La Alternancia es una realidad. La democracia está en ruta a su profundización.

Por Roberto Cañas

El 15 de marzo el pueblo salvadoreño se jugó y ganó el presente y el futuro del país. La Izquierda triunfó en las elecciones a pesar de todo lo que la derecha hizo por evitarlo. Los votantes depositaron su confianza en Mauricio Funes (MF) para dirigir El Salvador.

Durante muchísimo tiempo soñamos este momento, miles de salvadoreños ofrendaron generosos sus vidas por el cambio que hoy tenemos. Sin su sacrificio, sin su entrega no estaríamos disfrutando de esta victoria.

Cuando se preparó la Ofensiva General del 10 de enero de 1981 y también cuando se planificó la Ofensiva de noviembre de 1989 los revolucionarios teníamos como punto de contacto después de la victoria la Plaza Libertad. Hoy de manera electrizante los activistas del frente celebraron la victoria electoral en un lugar tremendamente simbólico, en el corazón del barrio de la derecha: El Paseo General Escalón. Y allí estaban presentes con todos los asistentes, Lil Milagro Ramírez, Roque Dalton, Luis Díaz, Rafael Arce Zablah, Felipe Peña Mendoza, Rafael Aguiñada Carranza, Febe Elizabeth Velásquez, Schafik Handal

La época de ARENA se terminó y El FMLN inicia una nueva era en la vida nacional en la que el fin de su actividad será sin duda la consecución de la “justicia social, la seguridad jurídica y el bien común”. Pero debe quedar claro desde el principio que el FMLN únicamente podrá gobernar el país y ser fuerte, si retoma y fortalece su vinculo con el Movimiento Social, ésta es la alianza principal, del nuevo gobierno, solo con el respaldo de la poblacion organizada, con la lucha de los salvadoreños-as se podrá con mucho esfuerzo crear un nuevo país.

Hoy más que nunca la izquierda victoriosa deberá agudizar su capacidad de análisis de la realidad nacional, de elaboración de pensamiento político, de estudio de la experiencia internacional, para poder hacer las propuestas audaces y correctas que demandan las circunstancias.

Se dice que las señas de identidad de la democracia son la alternancia en el gobierno y el reconocimiento de la derrota por parte del candidato que pierde las elecciones. ARENA aceptó su derrota es una buena señal. Esperemos que la cúpula arenera acepte completamente la nueva realidad.

A partir del 1 de junio del 2009 el reto es desarrollar un Plan para los primeros 100 días donde se den signos claros de la voluntad política del nuevo régimen para enfrentar la crisis económica, alimenticia, energética y ambiental que existe en todo el mundo. Se deben dar en el Plan pasos firmes para estabilizar los precios de la canasta básica, de las medicinas, medidas para que la ciudadanía tenga seguridad en sus personas y en sus bienes.

Gobernabilidad y búsqueda de la justicia social son los nombres del juego a partir del 1 de junio. Los Acuerdos de Paz, firmados en Chapultepec hace 17 años ya no aseguran la gobernabilidad hoy a finales de la primera década del siglo XXI. Se necesita pactar los nuevos consensos básicos que permitan sacar el país adelante en los próximos 15 años.

El Salvador y nosotros ya no somos los mismos después del 15 de marzo de 2009 los principales sujetos políticos y sociales tienen que cambiar su practica y ponerse a la altura de las circunstancias, y el pueblo soberano debe estar listo para demandar transparencia y rendición de cuentas en la gestión gubernamental. El 15 de marzo se escribió la historia.

La transición a la democracia, con la Alternancia en el Órgano Ejecutivo dio otro paso importante más.
Enhorabuena!!!

martes, 10 de marzo de 2009

LA VOLUNTAD DE HACER PERIODISMO RESPONSABLE

Por Lya Ayala Vallejo
Todos los sectores sociales, políticos y económicos han intervenido de alguna u otra manera en el proceso electoral actual, un momento importante y determinante para el país, y esa participación permite observar más compromiso con el rumbo que toma el país. Uno de estos grupos son los periodistas, quienes trabajan todos los días en los medios de comunicación, quienes todos los días tienen contacto directo con este destino.

No me referiré a las empresas periodísticas, porque como periodistas sabemos que al entrar a trabajar en ellas aceptamos las políticas laborales, sin embargo, existe una línea importante que diferencia a los simples recogedores de información de los periodistas: el compromiso con la búsqueda de la verdad, no la verdad relativa, esa verdad no existe.

Más allá de este momento, que pasará después del 15 de marzo, el trabajo periodístico como uno de los garantes del proceso democrático debe ser permanente. Ha sido triste leer y observar, tanto en los medios escritos como de televisión, el poquísimo, casi nulo compromiso de los periodistas con la realidad histórica del país, se echa de menos la capacidad analítica y sintética de un proceso, en el cual hay que invertir lectura y observación profundas.
Existe un argumento generalizado en el mundo del periodismo nacional: si no se trabaja en alguno de los medios de comunicación, dónde se desarrolla la labor profesional. Y la falta de oportunidades de laborar sin filiaciones ideológicas parece ser un cuestionamiento válido y sobre qué posición tomar. Solo que la muestra de pasividad mental resulta poco convincente, sobre todo, para una generación joven que debería demandar una sociedad realmente democrática, una generación que debería cuestionarla y entrar al ruedo sin complejos, una generación que debería buscar por ella misma, con ímpetu, los espacios para opinar y hacerse escuchar.
El problema no radica en que la empresas periodística prescindan de una posición ideológica o simpatía por determinadas posturas, a nadie debe impedírsele optar por ello, eso forma parte integral de la democracia. La dificultad radica en que los periodistas se acomodan a una posición y se van ajustando a ella con el quehacer cotidiano, que llega a envolver su existencia profesional con un velo de indiferencia que lo lanza a recoger información, escribirla sin darse cuenta que en ese proceso pierde la identidad propia y se transforma en un sordo ante su propia realidad.
Y sí, es verdad, no es sencillo para los periodistas salvadoreños, las opciones son mínimas, tienen que decidir a raja tabla: alguno se queda y realiza una labor en áreas donde apoyan lo social, con poco sentido del tiempo y el esfuerzo. Mientras en otras áreas se cuece la información deliberadamente para generar posturas e ideas preconcebidas.
Hay mucho de oscuro en los proceso de elaboración de las notas informativas en los medios de comunicación salvadoreños, unos más, otros menos; pero amparados en posiciones extremas. Eso es lo peor que le puede suceder a un profesional que por falta de voluntad e ideas firmes, se quede mirando o que por falta de compromiso consigo mismo, con la ética, se queda esperando a ver qué sucede. Particularmente, la profesión del periodismo demanda posiciones que requieren criterios sólidos e insobornables. Hay otros, los menos, que saben exactamente lo que hacen y utilizan la profesión para lograr fines y propósitos específicos para influir sobre la realidad.
Hay poco de aquel periodismo que da gusto leer, donde se aprecia la buena pluma, el uso de la técnica, el acopio de amplia cultura, de valoraciones desapasionadas en las que prime el criterio de periodismo comprometido con la verdad.

miércoles, 18 de febrero de 2009

PÍRRICO Y ESCUÁLIDO ANTIPOEMA DE AMOR



Por Antonio Hernández

SAN SALVADOR – Tras la pérdida de la alcaldía de San Salvador por parte del FMLN, la pluma del abogado Antonio Hernández escribió los siguientes versos que ahora comparte con los lectores de ContraPunto.



Pírrico y escuálido antipoema de amor
(con el perdón sea dicho al pasar)


Los y las que propiciaron que se perdiera
la Alcaldía de San Salvador
(y fueron calificados como revolucionarios y no
como tontos útiles de la derecha y el imperialismo)
los que han puesto en riesgo la posible alternancia
presidencial en el país
los que negaron las amplias alianzas
(porque es mejor solos que “mal acompañados”)
los que a la hora de las horas pusieron
cara de “yo no fui” (fue teté)
y se perdieron fugaces por las veredas de la humazón ideológica,
la verdad absoluta, la línea del partido
(el camarada tiene siempre la razón)
los que se hicieron los locos, relocos y recontralocos
los que ni siquiera tienen cargo de conciencia
(por eso de la enfermedad infantil del izquierdismo)
los vacunados contra la crítica, la hipercrítica y megacrítica
los que apenititas oyen
los cabeza dura, los incurables, los cuadraplégicos
los tullidos del corazón y las entendederas
los primeros en recitar a Marx, Engels y Lenin
los que si ven los árboles no ven el bosque
mis pequeños saltamontes sin su blanca nieve
sin su príncipe azul, sin director de orquesta
los albaceas de Mao, Fidel y el Ché
los que por avanzar retroceden
por persignarse se arañan
los que no tienen nada que perder
-salvo los chones-
los tontos más tontos del mundo
mis radicales, mis ortodoxos
mis dogmáticos, mis puros,
los que han perdido el rumbo, la carta
astral, la cordura
mis compatriotas, mis casi hermanos
mis pese a todo compañeros de viaje
aunque solo sea de guarón macho
marihuana y otros artificios
de efectos similares.
Salú




Antonio Hernández. Enero, 2009. (después de la noche triste)
Publicado en:

jueves, 12 de febrero de 2009

EL ESCABROSO CAMINO A LA DEMOCRACIA

Por Lya Ayala Vallejo
¿Los salvadoreños hemos aprendido a vivir en democracia? Cierta duda me asalta dado los acontecimientos recientes. Es verdad que estuvimos prestos a votar y a participar, pero me extrañó que buena parte de los analistas, medios de comunicación y organismos observadores se apresuraran a decir que hay un avance significativo en el proceso democrático del país.
Es posible que el optimismo nos gane porque mostró una de sus expresiones mas claras en las elecciones municipales y legislativas; sin embargo, la democracia no es solo eso.
Luego del 18 de enero regresamos a la realidad, que nos golpea con sus reflejos cotidianos y nos ha vuelto inmunes a la violencia y la falta de respeto hacia los demás. Un ejemplo reciente es la truculenta manera en que se utilizó a los candidatos presidenciales del PCN en función de componendas y acuerdos partidarios.
Los slogans de los partidos mayoritarios apelan a la recién descubierta responsabilidad de los salvadoreños sobre su participación razonada: piden votar con inteligencia y sabiduría. Pero no es suficiente pensar que por la tranquilidad que se percibió en algunos centros de votación en las elecciones pasadas indique que el proceso democrático haya avanzado suficiente.
Cierta educación cívica se demostró, pero habría que considerar otros factores: la idiosincrasia y el liderazgo político en la ciudad y el interior del país es diferente, la campaña y propaganda políticas fueron inmisericordes con el público, los medios de comunicación ajustaron su agenda a los intereses partidarios. Si todos estos elementos se conjugan se crean condiciones para que la mirada de la sociedad civil a la realidad política del país siga siendo parcial y oscura.
Así no hay avance, porque el ciudadano todavía no dispone de las herramientas para crear en conjunto una sociedad que abarque condiciones sociales, económicas y políticas que permitan ser solidarios, tolerantes y reflexivos sobre la realidad individual y colectiva.
El Salvador es un país donde todo está por hacer, en donde siempre falta algo que enmendar por eso no podemos dejar de enfatizar que somos muy jóvenes en materia de educación democrática.

martes, 3 de febrero de 2009

LOS PROBLEMAS DEL PODER


Para comenzar esta pequeña reflexión es importante definir ¿Qué es el poder? Éste puede ser definido como la capacidad de influir en las personas; también se podría decir que es la manera de cómo los líderes extienden su influencia sobre los demás para el logro de sus objetivos, pero de una forma más literal el poder se puede definir como “la capacidad de un individuo o grupo de individuos para modificar la conducta de otros individuos o grupos en la forma deseada y de impedir que la propia conducta sea modificada en la forma en que no se desea".

El ser humano tiene el poder de pensar, pero muchos no lo hacen correctamente. El acto irreflexivo y espontáneo sustituye a la razón, por eso la razón no siempre esta ahí donde está el poder. El poder es un arma de doble filo en manos de quien no ha hecho un inventario honesto de sus virtudes y desgracias, lo cual puede conducir con suma facilidad al engaño.

Un técnico se convierte en experto y un mediano profesional en sabio doctor, el alcalde se cree dueño de la cuidad; el presidente, patriarca del Estado y de la República; y el ministro, el director, el decano: señores de su heredad, en su feudo.

El poder aísla y va cubriendo a sus víctimas de una coraza de desconfianza en los demás, aunque no le sirva para ocultar a la sociedad de sus temores y desatinos.

La sabiduría y el poder cuando no andan juntos producen mayores desgracias. El poder ejercido por el hombre es decisión y consulta, firmeza y comprensión; capacidad y enseñanza; aprendizaje y aceptación. No es dualidad, arrogancia, mandato, ineptitud.

La finalidad, el objetivo primordial del poder es privilegiar a la comunidad, a la sociedad donde esta siendo ejercido; de otra forma se escapa, se pierde irremediablemente.

Por último, el poder por si solo no es malo, el problema es que cuando se llega y se tiene en las manos no se quiere soltar, es decir que quien lo ejerce se olvida de quien o quienes lo han llevado ha obtener ese poderío; y es ahí en donde se encuentra el gran dilema, porque a partir de ahí se inician las injusticias sociales. Así como el ser humano es dialectico ante la dinámica social, así también el poder no debe concentrarse en una sola persona, o en un solo grupo por tiempo ilimitado, sino que también debe de cambiar, debe de transformarse, debe de existir una total y sustancial alternancia dentro de quienes ejercen el poder público, económico y político, para poder generar un impacto positivo dentro de las sociedades.

Br. Lucía Sánchez
Es Estudiante de Derecho de la Universidad de El Salvador

¿LA SOCIALDEMOCRACIA COMO FIN DE LA HISTORIA?


Hace casi 20 años Francis Fukuyama escribió, pocos meses antes de la caída del muro de Berlín, un ensayo sobre el fin de la historia en la revista estadounidense The National Interest, artículo que posteriormente se convertiría en libro. El argumento básico era el siguiente: con el proceso de reforma lanzado por Mijail Gorbachov en la Unión Soviética, conocido como perestroika, el gran rival del mundo atlántico desaparecía y, por tanto, cesaba la lucha ideológica con la victoria incondicional del capitalismo y la democracia liberal. Fukuyama, además, examinaba el potencial de otras ideologías como el fundamentalismo religioso o el nacionalismo, concluyendo que nunca podrían convertirse en auténticas alternativas a la democracia liberal capitalista, si bien no iban a desaparecer.

La idea de Fukuyama era sugerente y, desde luego, fue oportuna en aquel momento histórico. La propuesta también generó fuertes críticas, algunas infundadas por malinterpretar el mensaje original. La más típica es la que consideraba la tesis del fin de la historia como la ausencia de eventos históricos de importancia, algo que Fukuyama rechazó expresamente en su ensayo.

Otra crítica, algo más elaborada, proveniente del recientemente desaparecido Samuel Huntington, consideraba que la lucha ideológica secular pasaría a ser religiosa o étnica, con la famosa tesis del choque de civilizaciones. Los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 confirmaron para muchos la validez de esta tesis. Con todo, y a pesar de que el fundamentalismo islámico supone una amenaza importante, Fukuyama ya dijo en su escrito de 1989 que esta ideología no es una opción atractiva, a diferencia del comunismo durante la guerra fría, más allá de los Estados de mayoría musulmana (o entre colectividades musulmanas en países no musulmanes), donde además sólo una minoría comparte sus postulados. En este sentido, esta ideología no es realmente una alternativa viable a la democracia liberal, ni se puede argumentar que es un estado superior en la evolución ideológica, de las ideas, más bien al contrario, supondría una regresión.

No obstante, la tesis original de Fukuyama sí que debe ser corregida al menos en un aspecto fundamental, si se quiere que mantenga un cierto poder explicativo de la realidad, sobre todo a la luz de los acontecimientos derivados de la crisis financiera mundial iniciada en julio de 2007 en Estados Unidos, y aun antes, por el fracaso de las políticas neoliberales en América Latina y África.

Fukuyama consideró que la victoria de la democracia liberal sobre el comunismo soviético resolvía los problemas socioeconómicos dentro de las sociedades occidentales y en los países en vías de desarrollo. Declaró, además, expresamente, que ya no había contradicción entre capital y trabajo, y obvió en todo caso las importantes diferencias entre el capitalismo estadounidense y el europeo continental, y las diferentes culturas políticas que subyacen a las decisiones de política económica a uno y otro lado del Atlántico.

Es cierto que la democracia liberal es el elemento común y definitorio de los países occidentales. Sin embargo, al obviar la importancia de las d emocracias sociales de Europa occidental, que completan el paradigma del Estado liberal, tal y como nos enseñaban Norberto Bobbio y Gregorio Peces-Barba, entre otros, se acaba poniendo al capitalismo a la americana como el paradigma de ese proclamado fin de la historia. Más aún, no se tiene en cuenta la tensión permanente entre Estado y mercado que existe en el seno de las democracias liberales, y las opciones políticas que la animan, y que debemos reconocer como neoliberalismo y socialdemocracia. Palabra esta última que está conociendo un renovado vigor a la luz del desconcierto generado por la crisis financiera.

En pocas palabras, podemos decir que la socialdemocracia es la ideología que, a diferencia del liberalismo clásico, persigue la igualdad real sobre la formal y que opera de acuerdo con el principio de la prevalencia de la política democrática sobre la economía, tal y como señala Sheri Berman. En el paradigma socialdemócrata, el sistema de mercado existe (a diferencia de lo que sucedía en la Unión Soviética), pero opera dentro de las reglas que fija el poder político, lo que incluye al Estado de bienestar, hasta hace unos años tan denostado por insostenible por los publicistas neoliberales.

En este sentido, cabe considerar al neoliberalismo, que inicia su auge como paradigma político cultural dominante en la década de los setenta, como una desviación temporal en esa evolución ideológica de impronta hegeliana que proponía Fukuyama, ya que pretende volver a un estado anterior de la humanidad, el del laissez-faire, donde la economía prevalece sobre la política, y donde no hay posibilidad de pacto entre el capital y el trabajo, ya que el primero debe prevalecer, sin ambages, sobre el segundo.

Esto no significa que el neoliberalismo no haya aportado nada bueno a la historia de las ideas, pues ciertamente las políticas keynesianas tradicionales necesitaban algunos ajustes y correcciones, en particular en lo relativo al uso excesivo de políticas monetarias procíclicas para alcanzar el pleno empleo, especialmente durante la década de los sesenta en los Estados Unidos y en el Reino Unido, donde por cierto, la tradición socialdemócrata ha sido históricamente más débil. Este error, en particular, generó una espiral inflacionaria, la quiebra de la política de rentas y del pacto entre el capital y el trabajo y, finalmente, el ascenso de la ideología neoliberal. Con todo, el neoliberalismo no se contentó con devolver cierta racionalidad a la política monetaria. Su agenda, como hemos visto, iba mucho más lejos. Animada por un individualismo descarnado buscó, y en parte logró, bajo los Gobiernos de Margaret Thatcher y Ronald Reagan, la privatización de sectores económicos estratégicos y de determinados servicios públicos. Pero, sobre todo, se desregularon los mercados de trabajo nacionales y los flujos financieros internacionales, con las consecuencias que hoy conocemos: mayores desigualdades, menor crecimiento económico y hasta colapso financiero. Peor aún, el paradigma neoliberal alcanzó en el discurso público lo que Antonio Gramsci denominaba "hegemonía cultural", llevando a que incluso la izquierda adoptara el lenguaje del adversario. De este modo, el debate político de las últimas décadas se ha ceñido a determinados parámetros y términos fundamentales de la agenda neoliberal, dentro de los cuales conceptos como flexibilidad laboral, competitividad o reformas estructurales funcionaban como polos en torno a los que giraban las discusiones de las políticas públicas.

El reto para la socialdemocracia, en un mundo cada vez más interconectado e interdependiente, consiste en alcanzar grados de integración y cooperación política entre los países que permitan la recuperación del equilibrio entre Estado y mercado. El momento histórico es propicio. Aunque el carácter asimétrico de la globalización, escorada hacia lo económico (y sobre todo hacia lo financiero, con la libertad de movimiento de capitales), no sugiere que la socialdemocracia sea el fin de la historia, resulta difícil afirmar que los últimos 30 años de neoliberalismo constituyen el ideal al que aspirará la mayoría de la humanidad.

La crisis financiera mundial quizás ponga de relieve lo que ya era, en realidad, evidente: el fracaso de la ideología neoliberal tanto en los países desarrollados como en aquellos en vías de desarrollo, y la urgente necesidad de recuperar el paradigma socialdemócrata en el discurso público.

Domènec Ruiz Devesa

Tomado de:http://www.elpais.com/articulo/opinion/socialdemocracia/fin/historia/elpepuopi/20090203elpepiopi_4/Tes

lunes, 2 de febrero de 2009

NO CON NUESTROS NOMBRES


Hace unos días el partido ARENA inició la difusión de un mensaje publicitario en el que trata de establecer la intolerancia de su adversario político, el FMLN, haciendo uso para ello de los nombres de cuatro personas que hemos dejado de militar en este último partido político.


El formato, el lenguaje y el contenido del mensaje es lo que en el caló político se denomina campaña sucia, entendiéndose por esta un conjunto de acciones que más que hacer planteamientos, difundir o discutir ideas, busca desacreditar o desprestigiar al adversario.

También busca este tipo de propaganda crear estados de ánimo, o percepción colectiva que lleven al miedo o infundan incertidumbre y temor.

En el caso de este mensaje radial en particular, ARENA trata de hacer ver al Frente como intolerante y poco respetuoso del derecho de otros.

Precisamente es intolerancia y poco respeto a nuestro derecho lo que ARENA muestra al hacer uso sin consulta de nuestros nombres para su propaganda sucia.

Frente a la difusión de este comercial, sin la autorización por mi parte o por la de Ileana Rogel, es que ambos firmamos un comunicado que hemos enviado a los medios de comunicación este día, en el que aclaramos:

1. Que no se nos consultó el uso de nuestros nombres para ese mensaje publicitario.

2. Que no aprobamos ni la acción de hacer propaganda usando nuestros nombres, ni el contenido del mensaje.

3. Que este tipo de acciones por parte del partido ARENA entran en directa contradicción con: la institucionalidad, el respeto y la defensa de una sociedad de derechos que su mensaje pretende difundir, y además representa una acción, a nuestro juicio; antiética.

4. Que como Ciudadana y Ciudadano le exigimos al Partido ARENA que deje de utilizar nuestros nombres en su campaña.

Yo aspiro a vivir en un país mejor, y es precisamente por lograr eso para mis hijos y para todos los salvadoreños que he luchado desde que era un adolescente. No es con abuso de autoridad y propaganda sucia como esto se logrará.

Dr. Héctor Silva Argüello

Publicado en: http://www.elecciones2009.elfaro.net/index.php?option=com_content&view=article&id=145:no-con-nuestros-nombres&catid=12:opinion&Itemid=11